jueves, 1 de noviembre de 2012

LA UNION HACE LA FUERZA





Medio sueño cumplido

La noche del 31 de octubre, cuando el reloj marcaba las 23:30, la pantalla del Congreso de la Nación mostró, en letras verdes mayúsculas, la palabra “AFIRMATIVO”. Esa palabra encendió las gargantas y los corazones de miles de músicos que sienten cercano el sueño postergado por tantos años: la creación de la Ley Nacional de la Música y su principal órgano: el Instituto Nacional de la Música (INAMU).

Luego de una maratónica sesión en donde también se aprobó la Ley del voto a los 16 años, la música se hizo presente en la Cámara de Diputados y los miembros de las organizaciones impulsoras de este proyecto: la UMI (Unión de Músicos Independientes), FA-MI (Federación Argentina de Músicos Independientes) y MÚSICOS CONVOCADOS celebraron mediante cánticos y eufóricos abrazos, este gran paso hacia un objetivo colectivo que es tan necesario como inminente.

Durante todo el día se vio desfilar por el Congreso de la Nación a muchísimos referentes de la música argentina de diversos estilos y épocas (Diego Boris, Cristian Aldana, Raúl Porchetto, Diego Frenkel, Edu Schmidt, entre otros) y también se mostró un video con las adhesiones de Charly García, León Gieco, Teresa Parodi, Gustavo Ceratti, el artista plástico Rocambole, Willy Quiroga y otros dos gigantes de la música como Mercedes Sosa y Luis Alberto Spinetta, que ya no están físicamente pero sí espiritualmente y han dejado, solidarios como siempre fueron, su apoyo a esta Ley que beneficiará a las generaciones de artistas que están por venir.

Al aprobarse la Ley Nacional de la Música en Diputados, ahora resta que se sesione y apruebe en el Senado para luego reglamentarla y que comience otra etapa: la de la gestión.

¿En qué consiste la Ley Nacional de la Música?

La idea principal de la Ley Nacional de la Música es crear un organismo que fomente, promocione y apoye la actividad musical en todo el país, de la música en general y de la nacional en particular. Entre los principales puntos de la Ley se encuentran:

Creación del Instituto Nacional de la Música – INAMU.
Creación de Circuitos Estables de música en vivo.
Participación de organizaciones de músicos independientes para distribuir beneficios.
Mejorar la difusión de la música independiente en los Medios.
Acercar proyectos musicales y eventos culturales a sectores de nulo acceso.
Capacitar y enseñar a los músicos sobre sus derechos como trabajadores.

Para ello se creará un Directorio (Presidente y Vicepresidente), una Asamblea Federal (24 integrantes) y un Comité Representativo (17 miembros). Las decisiones no podrán ser tomadas por el Directorio sin previo consentimiento de la Asamblea Federal, lo cual le da a esta Ley un carácter federal, que es uno de los puntos estratégicos del proyecto. La idea es estimular la producción y difusión de música en todo el país sin necesidad de tener que venir a Capital Federal para poner en marcha un circuito de música en cualquier pueblo o ciudad del resto del territorio nacional. 

Otro punto importante será la creación de los Centros de Producción Musicales, los cuales se subdividirán en Departamento de Música Grabada, de Música en Vivo y de Difusión. De allí saldrán Subsidios y Vales para la fabricación, edición y difusión de música, ya sea grabada o ejecutada en vivo.


Y uno es todos, y todos somos uno

No se hubiera llegado a generar y a debatir en el Congreso un proyecto como la Ley Nacional de la Música sin un cambio de paradigma; sin descartar esa concepción errada de que los músicos deben transitar solos el arduo camino de la música. Sin comprender que la suma de nuestras ideas puede (siempre) mucho más que la visión de uno solo. O que lo colectivo supera a lo individual, porque hace falta unirse para generar grandes cosas, grandes cambios que ayuden a las generaciones venideras. Y este cambio empezó con el sueño de unos pocos, con la visión a futuro y la incansable lucha de un grupo de locos que soñaron con días como éstos, comandados por Diego Boris y Cristian Aldana, y por otros locos que se les fueron sumando, bajo el simple lema de “y uno es todos y todos somos uno”.

Como este loco que escribe, que alguna vez también comprendió el mensaje y hoy se suma a la lucha, a esta linda y bella lucha por seguir construyendo melodías que ayuden a armonizar la vida de todos nosotros. Porque de eso se trata, ni más ni menos: de armonizar y crear, para hacer la vida un poco más linda. 

 
Iván Salomonoff
Músico | Periodista | Socio de la UMI

Para más información sobre la Ley Nacional de la Música: http://www.musicosconvocados.com

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