Morir sin morir
quedándote hasta el alba,
sangrando cielo o piel,
silencio o verdad.
Sos alma de diamante.
Por eso rezo, rezo por vos.
Soñar que sos tiza,
carozo o eternidad
jugando en jardines
y bicicletas de cristal.
Y allí vas, parte del aire.
Por eso rezo, rezo por vos
Viviste en días de sal,
volando entre hadas,
indómitas flores
y mentes de barro.
Sos canción y antídoto liviano.
Por eso rezo, rezo por vos
Fuiste letra, durazno
y guirnalda.
Acordes que bajan y suben,
lunas que estallan.
Y además, vos sos el sol
Por eso rezo, rezo por vos.